BRASIL
La Vida es un bien sagrado que no permite manipulación y comercialización, dice la IECLB San Leopoldo, viernes, 9 de mayo de 2008 (ALC) - Las iglesias deben levantar su voz, junto a la de la sociedad civil, en el proceso de fortalecimiento de la bioética* y enfatizar que la dignidad de la vida humana no es propiedad ni conquista, sino dádiva de Dios.
La amonestación consta en el pronunciamiento "El cuidado por la vida", emitido a finales de abril por la Iglesia Evangélica de Confesión Luterana en Brasil (IECLB). El documento fue propuesto por el grupo asesor de Teología y Confesionalidad, enviado a consideración a los pastores sinodales y aprobado por la presidencia de la iglesia.
La vida es un bien sagrado, que tiene una profundidad insondable. Por eso, ella no puede ser transformada en cosa u objeto que pueda ser manipulado, vendido o comprado. Una cierta "lógica comercial transformó los seres vivos y el propio ser humano en objeto, cuyo valor es regulado por la oferta y por la demanda del mercado", apuntan los luteranos.
Al traer hechos para pensar, los luteranos destacan que existe hoy la posibilidad de reproducción de la vida en laboratorio, siendo posible, ahora, fecundar el óvulo sin la presencia del hombre. "La noción de procreación es substituida por la práctica de la reproducción, como siendo un proceso industrial", analiza el documento.
Empresas se transforman en propietarias de linajes genéticos de personas, animales y plantas, a través de la biopiratería, y los cientistas alertan que nuevas dolencias están siendo definidas o exageradas por especialistas, muchas veces financiadas por los propios laboratorios. "La ganancia es una fuerza poderosa que mueve a la industria farmacológica", evalúan los luteranos.
Aunque reconociendo que la ciencia promueve avances para la humanidad, y que muchas conquistas científicas se deben a los conocimientos acumulados por la biología y por la medicina, el documento llama la atención y advierte que la posibilidad de manipulación genética, vinculada a la exploración comercial de seres vivos, lleva a una relación perversa entre ciencia, comercio y creación.
"Es necesario, por tanto, despertar conciencia de que aquello que funciona tecnológicamente y es útil para el mercado no es necesariamente justificable desde la perspectiva de la ética cristiana", señalan los luteranos. Ellos destacan que los avances científicos no se constituyen en un problema meramente técnico, sino antes de todo, ético.
Las iglesias precisan, pues, informarse constantemente acerca de los avances científicos, para promover reflexión teológica a ese respecto y posicionarse, en la esfera pública, en cuanto a propuestas de ordenamiento legal de investigaciones y avances científicos.
La bioética, dice el texto, no se preocupa solamente de las cuestiones médicas,sino también de la sobrevivencia del planeta y el futuro de la humanidad.
* Bioética es el estudio interdisciplinario entre biología, medicina y filosofía - de esa última, especialmente las disciplinas de la ética, de la moral y de la metafísica. El termino fue construido a partir de las palabras griegas bios (vida) y ethos (relativo a la ética). Sus directrices filosóficas surgen después de la tragedia del holocausto, en la II Guerra Mundial, cuando el mundo occidental, choca con las prácticas abusivas de médicos nazis en nombre de la ciencia, crearon un código para limitar los estudios relacionados.
Agencia de Noticias Latinoamericana
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