martes, 8 de mayo de 2007

Desde Mexico contra el aborto

Hermanos:
Les envío un afectuoso saludo desde la Ciudad de México. Quisiera hacer algunas acotaciones al mail enviado por la Comisión Nacional de Bioética.
Hay personas dedicadas a la Bioética que dijeron que hay estudios que corroboran la existencia de actividad cerebral antes de las 12 semanas de gestación, por lo cual -científicamente- ya hay vida. Semanas atrás en el noticieros circuló la noticia de que Inglaterra los médicos se estaban negando a practicar abortos por cuestiones éticas, no religiosas. Ellos señalan que si cada día los avances tecnológicos permiten que bebés prematuros sobrevivan fuera del vientre de la madre, es paradójico que ellos maten a otros bebés con el mismo tiempo de gestación. Se cree que de seguir esta tendencia, tendrán serios problemas en 5 años.
Los datos estadísticos que se han dado están completamente manipulados, pues se incluyen a las mujeres que mueren por complicaciones en el parto o mujeres embarazadas que mueren en accidentes. Con ello se inflan las cifras y parece las mujeres afectadas son muchas más.
Las secuelas psicológicas de un aborto están comprobadas científicamente, no se trata sólo de un remordimiento por cuestiones religiosas.
La nueva reforma al Código Penal que YA ENTRÖ EN VIGOR, señala que antes de las 12 semanas de gestación NO ES UN ABORTO, sólo después de este tiempo es aborto, y por lo tanto delito. Para "no complicarse" nuestros legisladores prefirieron modificar el tipo penal. Además, con fundamento en la "Ley de los Derechos de las Niñas y los Niños", las niñas podrán acudir a practicarse un aborto sin la autorización de sus padres. El Jefe de Gobierno ha señalado que los médicos TIENEN que practicar los abortos, pues todos están obligados a cumplir con la "ley".
El sector salud no está listo para efectuar abortos, ni siquiera pueden atender a los heridos en accidentes o partos. Uno de los medicamentos que se utilizan para el aborto cuesta aproximadamente $135 dólares, y las clínicas muchas veces no cuentan ni con los medicamentos más comunes.
La bandera usada por los legisladores para aprobar esta reforma fue "ayudar a las mujeres pobres", pero el verdadero fin es enriquecerse a través de las clínicas de aborto que seguramente estarán próximos a abrir (esto no es oficial todavía, pero tendrá que suceder por las deficiencias del sector salud).

Lizbeth Monzalvo

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